05/03/2025
Arquitectura
Liu Jiakun: lo lírico y lo práctico

“A través de un extraordinario cuerpo de obra de coherencia profunda y calidad constante, Liu Jiakun imagina y construye nuevos mundos, libre de cualquier restricción estética o estilística. En lugar de un estilo ha desarrollado una estrategia que no se basa en un método recurrente, sino en evaluar de forma distinta las características y los requisitos específicos de cada proyecto”, declaró el jurado que otorgó el Premio Pritzker 2025 al arquitecto chino nacido en Chengdu, capital de Sichuan, en 1956.
Ciertamente, cuando se revisa la diversidad de enfoques de los edificios de Liu Jiakun, se podría pensar en eclecticismo. Pero la declaración del jurado da la clave: estrategia antes que estilo. De ahí que el lirismo y la practicidad coexistan en la trayectoria del diseñador. A partir de su trabajo en el Instituto de Investigación y Diseño Arquitectónico de Chengdu, su práctica se inscribe en las transformaciones que han cambiado la faz de las urbes chinas.
Con tres decenas de obras en su haber, Liu es un arquitecto-escritor, autor de varias novelas, lo que podría explicar el sentido narrativo que poseen algunos de sus edificios. Ha publicado además ensayos sobre la realidad china, la tecnología y la tensión entre utopía y vida cotidiana. “La arquitectura debe revelar algo: debe abstraer, destilar y hacer visibles las cualidades inherentes a la población local. Tiene el poder de moldear el comportamiento humano y crear atmósferas, ofreciendo una sensación de serenidad y poesía, evocando la compasión y la misericordia, y cultivando un sentimiento de comunidad compartida”, declara Liu Jiakun.
Elegimos cinco obras del arquitecto premiado como introducción a su significativo trabajo.
Museo de Escultura en Piedra Luyeyuan
Chengdu, 2002
Un juego de volúmenes ciegos de concreto, articulados por espacios intersticiales por los que penetra la luz natural. Dentro y fuera del edificio, una colección privada de esculturas budistas, realizadas en piedra. Con los años, la construcción ha ido integrándose al entorno con más fuerza, incorporando el paso del tiempo.

Fotografía: cortesía de Bi Kejian
Museo del Reloj de la Revolución Cultural
Chengdu, 2007
Parte del Complejo de Museos de Jianchuan, situado en una agitada zona comercial, el edificio se encierra sobre sí mismo creando espacios para la meditación y la reflexión sobre la historia moderna china, específicamente el período de la Revolución Cultural. Los muros de ladrillo y la estructura de concreto componen formas de expresividad cruda.

Fotografía: cortesía de Bi Kejian
Aldea del Oeste
Chengdu, 2015
A la vez arquitectura e infraestructura, el diseño de toda la manzana maximiza el espacio interior verde, con áreas deportivas y parque, con la voluntad de dar cabida a una vida pública diversa. En el perímetro, espacios comerciales y una pista de bicicletas en las que se puede andar a distintas alturas. Una utopía cálida.

Fotografía: cortesía de Chen Chen
Barrio Cultural de Songyang
Lishui, 2020
Un ejercicio de acupuntura urbana, que adiciona infraestructura cultural (museo, hotel, café y librería) a una zona tradicional del distrito de Songyang, en Lishui, decaído en los inicios del siglo XXI. La zona, animada por el Templo Confucionista y el Templo de Chenghuang, es un centro cultural y espiritual que busca recuperar su vitalidad.

Fotografía: cortesía de Arch-Exist
Renovación del Distrito de la Cueva de Tianbao
Luzhou, 2021
En medio de un paisaje exuberante, en una región conocida por los licores Lang, almacenados en cuevas naturales, Liu Jiakun erigió un pabellón para degustar las bebidas mientras se observa el entorno. Con resonancias de la arquitectura tradicional china, el complejo incluye un museo de la marca en una construcción caracterizada por sus voladizos.

Fotografía: cortesía de Arch-Exist