21/11/2024
Pensamiento
Exhibir el racismo
La galería Andrea Pozzo SJ de la Ibero (CDMX) presenta la exposición ‘Pasado presente. Racismo y colonialismo en la tarjeta postal’
¿Cómo hacer visibles los aspectos más hirientes (y vigentes) de la herencia colonial? En Pasado presente. Racismo y colonialismo en la tarjeta postal César Carrillo Trueba pone ante nuestros ojos un conjunto de imágenes que traen a la actualidad un largo proceso global de despojo que ha producido su propia cultura visual. La exposición abrió sus puertas el 12 de septiembre en la galería Andrea Pozzo SJ de la Universidad Iberoamericana, en la Ciudad de México, y da continuidad a la línea de investigación del antropólogo, autor del libro pionero El racismo en México (2010).
El núcleo de la muestra es la colección de postales del curador, adquirida a lo largo de años en sitios especializados y tiendas de segunda mano. Editor de la revista Ciencias de la UNAM, Carrillo Trueba montó en 2016, en el Museo de la Ciudad de México, Imágenes para ver-te. Una exhibición del racismo en México, donde presentó la diversidad de expresiones visuales del fenómeno. Pasado presente sigue esa senda con mayor especificidad, con un dispositivo expositivo que recrea las entradas de un diccionario para definir las categorías del archivo colonial y traerlas al contexto contemporáneo, de forma que resuenen en la experiencia del espectador.
Racismo y colonialismo son fenómenos conjuntos, razona Michel Foucault en el texto que puede leerse en un muro de la galería. “Las postales dan cuenta de este proceso”, explica César Carrillo Trueba.
Racismo y colonialismo son fenómenos conjuntos, razona Michel Foucault en el texto que puede leerse en un muro de la galería. “Las postales dan cuenta de este proceso”, explica Carrillo Trueba: “la violencia empleada, el sometimiento al imponer las plantaciones, el trabajo de servidumbre, la manera como los clasificaron, sus conocimientos y rituales reducidos a brujería, sus costumbres ‘salvajes’, su comportamiento de ‘bárbaros’, su exhibición como animales en las exposiciones universales, la sexualización de los oficios femeninos, en fin, al final resulta asombroso el inmenso registro construido desde la mirada colonial”. En el recorrido, el espectador encontrará diversos textos con los que las imágenes dialogan, construyendo un ensayo híbrido.
Museografía crítica
Un aspecto relevante de Pasado presente es el modo en que lleva sus postulados a la materialidad de los dispositivos de exhibición. De ello es responsable el Taller de Museografía, despacho con amplia experiencia que asumió el reto de hacer de la muestra un ejercicio coherente en distintos niveles. Alejandro García Aguinaco, director de TDM+, explica que buscaron dar un giro a los formatos de raíz colonial –vitrinas, gabinetes y cubos blancos–: “Se exploraron tres ámbitos del diseño como posibles lugares de descolonización: la narrativa, el aspecto y la experiencia del visitante. No queríamos generar un recorrido lineal sino proponer un espacio abierto y relacional en donde, a partir de una planta circular y panóptica, el visitante pudiera establecer un diálogo entre las postales, las obras contemporáneas y el espacio de participación”.
“Se exploraron tres ámbitos del diseño como posibles lugares de descolonización: la narrativa, el aspecto y la experiencia del visitante. No queríamos generar un recorrido lineal sino proponer un espacio abierto y relacional”: Alejandro García Aguinaco (TDM+).
Esta puesta en espacio de la tesis curatorial de César Carrillo Trueba hace uso de cartón honeycomb en el diseño del mobiliario de la exhibición, una elección estratégica a nivel conceptual y funcional. “Este material no sólo ofrece una estética distinta, sino que rompe con los estereotipos tradicionales de museografía, especialmente en lo que se refiere al cubo blanco que suele evocar ‘neutralidad’ y ‘pureza’, pero que en realidad refleja y perpetúa ciertas ideas de poder, orden y control”. El cartón se aleja del carácter impoluto que asociamos a museos y galerías, e invita al espectador a relacionarse con la exposición de una forma sensorial y participativa.
“Mi visión museográfica está profundamente enraizada en la idea de que los museos y las exposiciones no son espacios neutrales, sino plataformas de poder y diálogo que pueden (y deben) cuestionar, reinterpretar y desafiar narrativas dominantes”, amplía García Aguinaco, que estudió historia del arte en la Universidad Iberoamericana, para luego especializarse en el diseño de exposiciones en la Complutense de Madrid. TDM+ ha diseñado nueve decenas de exposiciones: “Cada proyecto museográfico demanda una reflexión profunda sobre los materiales, la disposición espacial y los dispositivos de exhibición, entendidos como herramientas que construyen significado. El diseño no es sólo un contenedor de objetos, es una parte activa del relato que se quiere contar”.
Dar a ver el racismo
“Me encontré con artistas contemporáneos que trabajan con postales, las evidencian, desnudan su carácter colonial y racista, provocan desasosiego en el espectador. Pensé que sería interesante incluirlos como una manera de efectuar la crítica del archivo colonial, es decir, de contraponer una mirada descolonizadora”, amplía Carrillo Trueba. En Pasado presente se exhiben piezas del estadounidense Ken Gonzales-Day, la sudafricana Nomusa Makhubu, el ecuatoriano François Laso Chenut (que trabaja con el archivo de su bisabuelo, el fotógrafo José Domingo Laso), el colectivo mexicano LaPiztola y la franco-polaca Margot Sputo. El contrapunto son citas de Hanna Arendt, Achille Mbembe, Edward Said, Aimé Césaire o Malcolm X, que refuerzan la idea de una exposición a la vez visual y textual, un espacio de pensamiento.
“En los medios o las campañas publicitarias se mantiene el ideal de belleza impulsado por las teorías raciales, imponiendo patrones coloniales pues, a pesar de haberse abierto un pequeño espacio a personas de origen africano o asiático, sus rasgos y la estética siguen siendo completamente occidentales”: César Carrillo Trueba.
“Colonización”, “Tipos”, “Nuevos tipos”, “Exhibir” y “Dar a ver el racismo” son los núcleos que articulan el recorrido no-lineal, sin jerarquías, que hace de cada visita una experiencia diferenciada. Y, sin embargo, una evidencia: el colonialismo crea ciertas imágenes y, con ellas, estereotipos que categorizan a los oprimidos. Pero ¿qué lecciones podemos extraer de estas tarjetas postales, de sitios tan distantes entre sí y, sin embargo, con un discurso racial semejante? “Las descripciones que acompañan las imágenes parecen haber sido escritas ayer, dado que las empleadas domésticas siguen siendo tratadas como criadas, los cargadores se rompen el lomo por el capricho de quienes los emplean, los jornaleros son tratados como en épocas en teoría ya pasadas, y quienes protestan por la destrucción ambiental de su territorio llegan a ser reprimidos de igual manera. Es una violencia que no ha desaparecido”.
“En los medios o las campañas publicitarias se mantiene el ideal de belleza impulsado por las teorías raciales, imponiendo patrones coloniales pues, a pesar de haberse abierto un pequeño espacio a personas de origen africano o asiático, sus rasgos y la estética siguen siendo completamente occidentales. Las postales dan cuenta de todo esto, lamentablemente no desaparecido, y los visitantes de la exposición dejan comentarios en ese sentido. Se logra así remover sensibilidades, suscitar la reflexión”, remata César Carrillo Trueba. Los interesados podrán atestiguar este pensamiento en imágenes hasta el 6 de diciembre.