21/11/2024
Artes visuales
Yoshua Okón: narraciones alternas
Además de ser uno de los artistas mexicanos más reconocidos de su generación, Yoshua Okón (1970) es también un impulsor de espacios para el arte contemporáneo en el país. Entre 1994 y 2002 estuvo al frente de La Panadería, un proyecto central del cambio de siglo, y posteriormente ha sido uno de los impulsores de SOMA, propuesta educativa que en noviembre alcanzará 12 años de trayectoria. Con exposiciones individuales y colectivas en países de América, Europa y Asia, Okón fue entrevistado por la Fundación Jumex Arte Contemporáneo en el contexto de la exposición Excepciones normales del Museo Jumex, que incluye su pieza Elefante (2020).
“Hago un híbrido entre performance, instalación y video. En muchas de mis obras trabajo en locaciones reales, que tienen cierta carga simbólica, con personas que no son actores y trabajan dentro de escenarios ficticios, que yo invento”. Sin embargo, Elefante es una pieza distinta a videoinstalaciones como New Decor (2001) u Oracle (2015). “La obra hace referencia al famoso modismo del elefante en la habitación, a esta verdad que de alguna manera todos ignoramos, este estado de negación en el cual estamos como humanidad respecto al Antropoceno”, explica.
En Elefante, una escultura negra de fibra de vidrio, Okón hace un comentario frontal sobre los efectos ambientales de nuestro modelo productivo, en el contexto de la innegable crisis ecológica (calentamiento global, extinción de especies, etc.). La figura del elefante ya había aparecido en otra pieza reciente, República bananera (2019), donde la recreación de una tienda de la marca Banana Republic, decorada con animales de origen africano, arde como una metáfora de las implicaciones que el imaginario colonialista tiene sobre realidades concretas.
La participación de Yoshua Okón en Excepciones normales no se limita a la pieza comentada; además impartió uno de los talleres que SOMA ofreció en el Museo Jumex, con el fin de explorar el paisaje que rodea al edificio. Forma parte de las búsquedas del artista mexicano, que concibe al arte y a la cultura como contranarrativas a la lógica dominante y busca producir “obras en las cuales el público pueda desarrollar su pensamiento crítico y llegar a sus propias conclusiones sobre el mundo y la realidad”.